A pesar de que ya no estamos cavando en la tierra, debemos usar nuestras fuerzas para llevar tanto las pesadas cajas así como las bolsas de 150 libras de tierra arriba de los tejados o a los patios traseros. Hasta ahora, hemos completado 9 huertos en Bayona. Sólo nos quedan 16 para que alcancemos la meta esperada!
Aparte del proyecto de jardinería, he estado disfrutando de la belleza de la isla, tanto como me ha sido posible. Durante nuestra primera excursión de InteRDom nos dirigimos al norte hacia Santiago, que es la segunda ciudad más grande del país. Realizamos un excelente recorrido del Centro León, un centro cultural en Santiago, donde aprendimos todo sobre el país, desde sus inicios hasta el presente. Luego nos dirigimos a visitar la casa de los padres de Reyna (la Coordinadora de las Pasantías de InteRDom). Su padre nos enseñó cómo cortar una mata de plátano y a desenterrar la yuca – dos de los principales alimentos básicos en la cocina dominicana.
Nuestra segunda excursión de InteRDom fue a La Cueva de las Maravillas. A medida que nos aventurábamos hacia las profundidades de la caverna podía sentir cómo descendía la temperatura en la oscuridad que me rodeaba. Las luces con sensores de movimiento nos alumbraban el camino a medida que caminábamos para ver las estalagmitas que se han formado naturalmente. No podía creer mis ojos! Era difícil imaginar cómo algo tan hermoso se ha formado de manera natural por debajo de la superficie de la tierra. El guía turístico nos enseñó las diversas pinturas rupestres que fueron creadas por los taínos, y que se han conservado maravillosamente en esta cueva de las maravillas!
Mi exploración personal finalmente hizo un círculo completo cuando CV (un pasante de CCNY) y yo decidimos que había llegado la hora de probar el caótico transporte público! Nos dirigimos hacia la concurrida calle Máximo Gómez, sin tener ningún conocimiento previo sobre la forma de cómo debíamos movernos. A los pocos minutos nos encontrábamos apretados en el asiento trasero de un carro público, junto con otros dos pasajeros, de camino a La Zona Colonial! A pesar de la incomodidad, sin tener aire acondicionado y con muy poco espacio, fue muy emocionante comprender finalmente cómo todo el mundo se mueve en esta ciudad sin tener que vaciar sus bolsillos (el paseo sólo cuesta RD $ 25!).
El carro público nos dejó en Conde – una calle peatonal llena de vendedores, tiendas y restaurantes. Pronto me di cuenta de que este sería el lugar ideal para comprar recuerdos (y para practicar mis habilidades para el regateo!). Una vez que se nos abrió el apetito, nos subimos a una guagua y nos dirigimos hacia Barra Payan – un lugar que está abierto las 24 horas y que es famoso por sus sándwiches y jugos frescos. Pedí uno de los combos, que contenía un sándwich, un jugo fresco y, para mi sorpresa, una barra de KitKat!
Al comenzar mi última semana en este interesante país espero que podamos alcanzar nuestras metas de jardinería y que podamos formar más recuerdos con mi maravilloso grupo de nuevos amigos. La aventura no termina aquí…
The blog also provides useful information for students and inspires lively debate and increased interest in exchange and the development of Hispaniola.